El presidente Alberto Fernández junto a la primera dama, Fabiola Yáñez, llegaron a despedirse de Maradona.
Este jueves a partir de las seis de la mañana se abrieron las puertas de la Casa Rosada para el público en general y poder despedirse del campeón del mundo. Tras algunos incidentes y empujones con la policía, comenzaron a ingresar de a grupos. Una vez dentro, las personas pasan frente al féretro y luego salen a través de la puerta de Balcarce 24.
Lágrimas, llantos descontrolados, cantitos de cancha, algunos hasta envueltos en banderas de Argentina. La cantidad de gente es inmensa para despedir al jugador más grande de la historia del fútbol.
Cada tanto se escuchan aplausos, que terminan con un “Olé Olé Olé, Diego Diego!”. Otros incluso pasan y le arrojan flores, rosarios, camisetas (de todos los clubes) como ofrenda.