El fármaco supresor del apetito provoca que las personas se sientan más llenas y consuman menos alimentos.

Riesgos de la popular inyección para bajar de peso, se trata de la semaglutida es una inyección para bajar de peso cuya creciente popularidad en Estados Unidos que se utiliza para el tratamiento de la diabetes tipo 2 y como medicamento contra la obesidad.

Este fármaco ha sido usado por famosos como el magnate Elon Musk, aunque los especialistas advierten por riesgos en su aplicación. La semaglutida es un análogo del péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1), aprobado para el tratamiento de la Diabetes Mellitus 2 (DM2).

Riesgos de la popular inyección semaglutida

Según el Instituto Nacional para la Excelencia en Salud y Atención (NICE), la evidencia muestra que la semaglutida puede ayudar a una reducción de peso de más del 10%, pues funciona como un supresor del apetito imitando una hormona intestinal llamada péptido-1, que está dirigida a las áreas del cerebro que regulan el apetito y el consumo de alimentos.

Los usos benéficos de la semaglutida también están acompañados por riesgos, según recoge la Biblioteca Nacional de Medicina (NIH) de Estados Unidos, destacando que la inyección puede aumentar el riesgo de desarrollar tumores de la glándula tiroidea, incluyendo carcinoma medular tiroideo. Por eso, se recomienda consultar con un médico.

El uso de este fármaco inyectado no sólo aumenta el riesgo de padecimientos en la tiroide, sino que cuenta con una serie de efectos secundarios, según la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA):